La Hora Más Silenciosa 2.2β Repite tu nombre 300 veces seguidas y descubrirás que no tienes

Ayer vi pasar una pequena procesion cerca de la parada de autobuses a las afueras de mi casa. Se festejo el dia de la Virgen de Guadalupe, una tradicion mexicana. Iba unas cuantas decenas de personas atras de de un pequeno altar de una virgen adornada improvisadamente. Cantaban la cancion de la guadalupana con mucho orgull, en medio del frio matinal.

Normalmente este tipo de imagenes me dan risa. El solo imaginarme personas hipocritas que dedican un tiempo a sus santos, pensando que su unica devocion es la mera vena, me provoca una mezcla de lastima, asco, risa y casi siempre, al ultimo, una condescendiente resignacion. Pero el caso era la excepcion. Ante los contados peregrinos, (debido, quiza, a la escases de catolicos en Juarez) se me vino a la mente la gran minoria de los creyentes de Jesus y Maria que realmente valen la pena. Me refiero a esa gente humilde que nace, crece y muere en la ignorancia en pueblitos apartados de las grandes urbes, y que la fe es algo imprescindible de su forma de ser. Una fe inocente. Esas personas no tienen nada, materialmente hablando. Viven quiza sin luz electrica, sin telefono, sin ningun tipo de lujo material. Lo unico valioso que tienen o, mejor dicho, lo unico valioso que creen tener, son sus santos. Esa fe les da un sentido a su vida, quiza un sentido deformado, ilogico, irreal, pero al fin y al cabo es un caminoq ue seguir. Que diferencia tienen con los beatos de las ciudades, que todo el ano se la pasan haciendole imposible la vida a los demas y tratando de acapararlo todo, disque porque tenemos que ser alguien en la vida, y a fin de ano van a la Basilica de Guadalupe con esa estupida cara de martires, arrodillados y diciendo hipocrita e ignorantemente: "He aqui tu hijo que sufre, madre mia!...".

Todo tipo de fe es danina. Es como la mosca en la sopa, lo ensucia todo; lo empana; lo ciega a uno. Estuve dandole vueltas a esto y me pregunte: Si estuviera en mis manos desmentirles, con pruebas irrefutables, las falsas ideas sobre su fe a esas pobres personas pueblerinas, lo haria? Tecnicamente estaria haciendo un bien: eliminar la mentiras del mundo. Pero esa gente, la fe de esa gente, no le hace dano a nadie, y hasta quiza sea algo que, si se elimina, la persona quedaria vacia, escueta. Quiza sea un sentimentalismo mediocre el mio, una compasion. Recuerdo un capitulo de Los Simpson, donde Lisa descubre que Geremy Springfield (el heroe historico de la ciudad) fue, en realidad, un villano asesino y usurpador. Entonces, Lisa decide terminar con esa mentira en la que esta envuelto todo el pueblo, pero antes de decirlo, ve a todos con sus gorras, banderas y demas artilugios en honor a Geremy, esperando a que ella diga unas palabras elocuentes sobre su heroe y... y no puede decirles la verdad. Solo dice que Geremy Springfield fue 'grande', lo cual conmueve a todos los presentes.

Quiza algunas falsedades no deban de salir a la luz. Quiza la condescendencia sea un verdadero acto de supremo amor al projimo. Solo quiza...

Estoy un poco más desahogado. No digo que me encuentro perfecto, pero me siento ya un poco más libre que hace unos meses. Vivo con otros tíos. Son hermanos, pero no me molestan sobre mis creencias. Tengo una habitación para mi solo, con refrigerador y televisión. Mucho mejor que con los otros, donde estabamos amontonados y sentía que mi privacidad sólo existía al cerrar la puerta del baño.

En fin, todavía hay algunas cosas que me hacen cosquillas, pero el futuro se ve bien.

Por otra parte, el entorno social, fuera de mi casa, está un poco crítico. Verán. Ayer nos descansaron en el trabajo por falta de pedidos. Muchas empresas se están viniendo a pique por causa de la crisis de Estados Unidos y la delincuencia que impera aquí en Cd. Juárez. Con decirles que hasta ya los Indios de Juárez, nuestro equipo de futbol de primera división, está en quiebra. Sus directivos no pueden sostener al club; no hay patrocinadores que se quieran arriesgar, dadas las circunstancias principalmente del crimen organizado. Aunque estoy seguro de que la Federación les va a tender la mano.

Anoche, llegando del trabajo, vi una noticia de esas que te hacen ir al baño. Resulta que el gobernador del estado de Coahuila (no recuerdo su nombre) se le ocurrió proponer la pena de muerte a todos los asesinos y torturadores. El muy ignorante, dijo que esos delincuentes no merecen ningún tipo de consideraciones. Dijo algo parecido a ésto:

"Ellos saben que desde la cárcel pueden dirigir sus crímenes, o pueden salir con el tiempo, o escapar. Pero ahora, el criminal sabría que no hay retorno..."

Y pregunto yo: ¿no sería mejor, proponer una reforma de las cárceles de México? Está demostrado hasta el hartázgo que la pena de muerte no da resultado. "Tú eres criminal, tú debes desaparecer". ¡Qué vergüenza! "Tú eres criminal, eres humano, como yo, pero me das vergüenza; no quiero que existas". ¡Cómo se disfrasa la sensura en estos días!

Las buenas noticias son que el Cruz Azul, el mejor equipo de México, ganó 3-1 al Atlante en el juego de ida de las semifinales. Dos finales consecutivas, casi estoy seguro. Hoy juega el Santos VS Toluca. Le voy al Santos: me agradan las revanchas. Creo que ahora sí ésta es la buena; tiene que ser campeón Cruz Azul. Lleva ya muchas temporadas siendo, si no el primero, el segundo equipo con el mejor plantel ofensivo. Todo está en la cabecita del técnico.

Se me olvida, creo que esta semana peléa de la Olla contra Pacquiao. ¡qué estupideces son esas de que hay muchos mexicanos que le van a Pacquiao! ¡Cómo me da náuseas el rencor de esta gente!

En fin, espero sea un fin de semana estupendo. Eso es lo bueno del frío, que no te deja salir de casa, pero que aveces la televisión parece hacer palidecer los placeres que no se pueden gozar de afuera.

 En este blog hablaré (entre otras cosas) de películas que ya haya visto. No abarcaré del todo el cine popular al que nos tiene acostumbrado Holliwood, ese cine sensacionalista y soso. Me limitaré más que nada a esas películas que realmente dejan algo, que verdaderamente pueden llegar a merecer el título de arte (algúnas de ellas, en su minoría, holliwoodenses).
 
Como quiera que criticar cine sea un acto común y corriente, no está de más decir lo que pienso de ello. El solo hecho de dar a compartir una crítica es ya un acto egocentrista. Muy a menudo, los críticos de cine quieren imponer su pensamiento (y a veces hasta su sentimiento) a los demás. Pretenden ser los poseedores del verdadero valor de tal o cual filme. Si a esta maloliente presunción le añadimos que es una actividad laboral de la cual se mantiene económicamente el individuo, nos darémos cuenta de que esta actividad ociosa es de las más estúpidas y falsas del mundo. Si le llamamos arte al cine, en ningún momento deberíamos criticarlo, al menos no de la forma en que se suele hacer. El arte no es criticable, es digerible, meditable, y lo que para uno pueda ser una obra de arte, para otro puede ser basura, y viceversa. Por lo tanto, la opinión de una sola persona (por más que se diga "conocedora") sobre una obra cinematográfica es subjetiva al cien por ciento, y no debería, en modo algúno, afectar o predisponer a los demás antes, durante, ni después de ver la película.

Si se comprende lo anterior, se comprenderá también que el espacio que yo le dé al cine en este blog es producto del ocio, pero no de la contradicción. Quiero compartir lo que a mí, personalmente, me dejó tal o cual película. Un filme (como todo lo que nos rodea) puede tener mil significados diferentes. Todo depende del espectador. Lo que creo yo que les servirá a los lectores, y que es poco probable que se halle en el tipo de crítica que describí arriba, es que puedan tener una visión más abierta de la obra en turno. Una opinión que, aunque personal, pueda complementar con facilidad la visión del lector, y quizá acrecentarla (motivo, este último, el cual es la razón más importante del concepto compartir).

GRACIAS.

He encontrado un diccionario. No sé qué hacer con él; si guardarlo o quemarlo. Es muy grueso, con cubierta de una piel de algún exótico animal. Parece ser una especie de Libro Sagrado. Lo hallé dentro de un boquete de un extraño árbol en el que me quedé profundamente dormido tras acostarme a su sombra, después de una larga caminata que dí cierto día por un extenso bosque. Me lo traje a casa quizá por esa extraña sensación de alivio que me dio, pues durante varios días habia estado sufriendo de unas terribles pesadillas, hasta aquél día.

Mientras decido lo que haré con él, transcribiré de vez en cuando una que otra cosa que me parezca interesante.

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Chris Gardner es un tipo casado y con un hijo, Christopher, de 10 años, más o menos. Vive en San Francisco. Vende aparatos de hospital muy lujosos y caros que, por lo mismo, son muy difíciles de vender, pero que las ganancias de uno solo, ayudan a sobrevivir a la familia durante todo un mes. Su situación empeora cuando se llena de deudas, y su mujer se lo reprocha a cada rato. Es entonces, cuando Chris decide buscar otro trabajo, a la par del que tiene ahora. En un incidente lleno de esperanza, decide entrar a tomar un curso de Corredor de Bolsa, un trabajo que, según un individuo con el que se topó, "sólo necesitas ser bueno con los números y saber tratar a la gente". Y al final consigue quedarse con el puesto, no sin antes haber pasado por muchos obstáculos de todo tipo, entre ellos, la separación de su esposa. Llega hasta a dormir con su hijo en un baño público.

A veces, cuando uno se pone a pensar en la vida económica de un norteamericano, piensa que es de las más cómodas del mundo. Un país grande, el más rico del mundo, donde, si hay algo abundante, eso es sin duda el dinero y la ambición, es difícil imaginárselo con gente hundida en la miseria. Y si se lo llega a imaginar, seguramente pasarán por su mente personas extranjeras, de México, Guatemala, Belice, Honduras, Brasil, China, africanos, etc. Personas que llegaron a ese país ilegalmente con el único sueño de tener un trabajo donde te paguen mejor y puedas seguir viviendo un poco menos difícilmente. Lo cierto es que Chris Gardner es norteamericano de nacimiento, y es una persona real que sufrió en carne propia lo que pasa en la película. El infortunio no conoce fronteras.

Will Smith, junto al verdadero Chris Gardner

Lo que más me gusta de este filme, es la manera de abordar el tema de LA FELICIDAD. Nos pasamos la vida buscando la felicidad; soñando con tener cosas mejores para nosotros y nuestros seres queridos. Nunca se llega a conformarse con nada, quiere uno seguir creciendo y creciendo, como temiendo que si no lo hacemos, alguien más vivo que nosotros llegará y nos dejará otra vez en la ruina. En En busca de la Felicidad, Gabrielle Muccino (gran director italiano) nos transmite la idea de que eso (la felicidad) no es algo que podemos mantener por siempre una vez alcanzado. Incluso no es algo que se lógre sólo una vez en la vida. Son tan sólo momentos, unos cuantos segundos que uno experimenta cuando logra de alguna forma "conectarse" con ese algo que es la esencia del poder de supervivencia humana. Ese "algo" puede ser originado por un triunfo laboral, un descubrimiento, una imagen, un nuevo trabajo conseguido. Algo que nos dá esperanzas de seguir viviendo.

Durante la película, un narrador va contando las distintas experiencias que tuvo Gardner, poniéndoles un título a cada una: "Siendo Estúpido", "Correr", etc. Al final, cuando Chris es aceptado en el trabajo, sale de la correduría y camina entre un tumulto de gente de distinta clase. Gente que va o viene del trabajo. Gente que talvez anda buscando trabajo; que tiene, probablemente, los mismos problemas que él tuvo; que está pasando por momentos difíciles con su pareja; que quizá se ha sacado la lotería... en fin, toda clase de gente con distintas historias en su cabeza. El narrador, en esos momentos, en una cámara lenta, con un Chris radiante de felicidad y orgullo, dice algo como:

"Esta parte de mi vida; esta pequeña parte se llama... «Felicidad»".

Una escena magnífica, de verdad.

Como dato anecdótico, al final, Chris y su hijo van caminando contentos y frente a ellos, en dirección opuesta, pasa un hombre afroamericano (igual que ellos) con una sonrisa complaciente. Chris lo ve como diciendo "en eso me convertiré". El de la sonrisa es el verdadero Chris Gardner, quien contribuyó en el rodaje, y ahora es un magnate de aquél país.

La recomiendo mucho, no se arrepentirán.

No es, pues, un chico "malvado" que sólo le interesa él mismo. Se podría resumir que es simplemente alguien a quien la falsedad del mundo le desaníma demasiado. Nada que ver con los llamados "rebeldes sin causa".

Es, pues, un tipo extraño; hasta cierto punto, amargado. Pero en el fondo, realmente es muy sentimental. Se dice que se inspiró en experiencias personales de su adolescencia cuando escribió la novela corta que estamos tratando. Si fué asi, me parece que fué muy travieso de su parte. Camuflajear una personalidad tierna y sensible tras una supuesta rebeldía y rudeza, me parece de lo más difícil y peligroso. Pero lo consigue. La prueba está en que la mayoría de los lectores se tragan esa idea de que Holden es un tipo rebelde sin causa, cuando en realidad es todo lo contrario, como ya expliqué. Aún asi, Salinger no se sonrojaría de leerme (como lo harían aquellos tipos rudos amantes del Guardián...), pues creo que en última instancia, ése es el propósito de Salinger: transmitir para los pocos esa excelsitud escondida entre nimiedades. Se ha de partir de la risa cuando lee esas estúpidas opiniones que aseguran que su libro incita a matar. No hay en modo algúno, ningún mensaje de violencia; sino un mensaje de seguir siendo niños y dejar de lado la hipocresía y banalidad del atareado mundo adulto, con todas sus modas, idealismos y guerras mundiales. O como diría Holden:

¿Para qué escribir en un blog? La diversidad es muy variada: hay quien lo usa de diario personal, donde uno pone las cosas que le pasan, no importando que muchas sean un tanto superficiales para el lector; publicar crónicas y opiniones noticiosas de política, música, deportes, sociedad, etc., como hacen muchos periodistas; exponer nuestros problemas, ya sea el de alguien parapléjico, una mujer discriminada en el trabajo, un adolescente incomprendido por sus padres o por la sociedad entera... También hay blogs dedicados a la informática. Por ejemplo, los hay desde brindar ayuda para Linux, hasta cómo decorar y administrar bien un blog. Incluso también hay bitácoras con fines pornográficos, algo que está quedándoles muy bien a las comunidades lucrativas de aquella industria.

En fin. La pregunta aquí es ¿Para qué el blog? ¿Qué fines persigue la persona al ser leída? Para muchos bloggers, mi pregunta es tonta; por ejemplo, para la industria lucrativa, es obvio que el fin es el dinero. Pero ¿qué decimos de aquellos bloggers que no anhelan dinero, ni premios, ni adeptos a, por ejemplo, un partido político? Yo diría que este fenómeno de los blogs, es una especie de escape de todos los problemas que aquejan hoy en día al ser humano moderno. La política, la economía, los problemas sociales, psicológicos, las guerras, la violencia en las calles... todo eso, de alguna forma se ve amainado por el sólo hecho de escribir en un blog y saber que otros le leen. En este mundo donde mucha gente se siente con las manos atadas y con vendas en los ojos y en la boca, los blogs son verdaderas oportunidades que uno tiene para expresar a los demás lo que uno ES. Sirve de válvula de escape a la penosa realidad en que se encuentra hoy en día la sociedad.

Por ahí he leído que decir las cosas que uno piensa y siente, o con tan sólo escribirlas, con eso basta para que uno descargue su interior de esas dudas, traumas, frustraciones, alegrías, etc. Es una terapia que ayuda a mantener la mente sana. Como dijo Carlos Fuentes, un escritor mexicano: "No hay pretextos para no escribir". Y qué mejor cuando el escribir te ayuda mucho en varios sentidos. Aunque aquí hay un punto importante: el ser leídos. ¿Por qué, si un blogger escribe, por ejemplo, un diario personal, desea ser leído por extraños? ¿No se supone que un diario personal es, como su nombre lo indica, algo personal, muy íntimo? Y de aquí me regreso a lo que dije antes. Uno quiere descargar esas energías que de alguna forma la sociedad le reprime. ¡Qué mejor que "echarle en cara" a la sociedad esos sucesos personales que a ella (la sociedad) seguramente ni le interesan! ¡Y qué sorprendente es enterarse que muchas veces sí que le interesan! Ésto de los blogs es algo profundamente psicológico...

Hay otro factor importante derivado del deseo de ser leído. El puro deseo, indica ego; indica desear ser aceptado, escuchado, comprendido. Creo que la cosa más egóica que ha nacido de la Internet es el Blog. Sin embargo, considero que también hay que derivar de ese supuesto ego, un propósito. Personalmente, me gustaría influir, ser escuchado, comprendido, aceptado... sólo con el fin de que alguien se beneficie de mis escritos. Incluso creo que el propósito de la vida es ayudar en la evolución de la raza; aunque si nos ponemos a pensar, más bien en estos momentos, para muchos, sería supervivencia, en vez de evolución.

Bueno, pues éso es lo que pretendo con este blog: influir de manera positiva. Voy a hablar de política, sociedad, deportes, literatura, música, cine, filosofía, religión, ciencia... todo lo que pase por mis narices. No sé si duraré con esta bitácora, pero trataré. Pueden opinar lo que quieran; no censuraré nada en absoluto, soy exageradamente alérgico a la censura. Por lo pronto, tampoco invitaré gente a que visite el blog, pues no sé si éste durará. Así que si me conoces, no te sientas ofendido por no haberte invitado a la inauguración.

Xhristian Bowie